Los propietarios de los alojamientos rurales de La Rioja tienen motivos para preocuparse, a tenor de los registros de ocupación del pasado mes de enero. Al menos, es lo que constata la última Encuesta de Ocupación en Alojamientos en Turismo Rural, del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Según los datos publicados por el INE, el número de viajeros que se hospedaron en casas rurales en La Rioja superó apenas la cifra de 800, lejos de los cerca de 1.200 de enero de 2018, con un fuerte descenso de más del 31%.
Las pernoctaciones muestran también este gran descenso. En enero de este año, se alcanzaron las 1.600, de nuevo muy alejadas de los datos correspondientes al mismo mes del año anterior, con más de 2.200, mostrando un descenso del 28%.
El grado de ocupación, por otra parte, alcanzó un promedio diario del 5,27%, frente al 7,66% del año anterior, con un descenso del 2,39% interanual. Un hecho que se acentuó durante los fines de semana, cuando el grado de ocupación, con respecto a enero del año pasado, pasó de un 22,2% a un 14,15%.
