En los últimos tres años, el proyecto Life+Iberlince, impulsado por el programa LIFE de la Unión Europea, ha liberado un total de 53 ejemplares de lince ibérico, sólo, en la comunidad de Castilla-La Mancha y el año pasado ya comenzó a dar sus frutos: 6 hembras parieron a 19 cachorros en las zonas de reintroducción de los Montes de Toledo y la Sierra Morena Oriental en la provincia de Ciudad Real.
Imagen destacada: Cachorro de lince ibérico, por: José Antonio Báñez. Life+Iberlince
La noticia, que se dio a conocer ayer, está en el nacimiento de, al menos, otros dos cachorros en la Sierra Morena Oriental; y no se descarta que Mesta, la madre, pudiera haber dado a luz a más crías. Por el momento las cámaras camufladas que sirven para realizar el seguimiento visual de los felinos no han sido capaces de aclarar si la camada ha sido más amplia.
Este es el primer nacimiento de linces ibéricos del que se tiene constancia en la provincia de Ciudad Real este año, después de que Malvasía diera a luz a cuatro cachorros en los Montes de Toledo este mismo mes.
No cabe duda de que el proyecto, dirigido desde la consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Medio Rural de Castilla-La Mancha, está siendo un rotundo éxito y se espera que lo continúe siendo.
La población de esta especie autóctona de España y Portugal no para de crecer y en 2015, la UICN, organización internacional encargada de catalogar el estado de conservación de la fauna a nivel mundial, rebajó un nivel el estatus de la especie de “en peligro crítico” a “en peligro”; una buena noticia, sin duda, pero que nos recuerda que aún queda mucho trabajo por hacer. De momento, podemos afirmar que se está recorriendo el camino correcto.